Las Expropiaciones acabarán teniendo una ficha similar a las de los Cronopios y los Famas. Vida propia. Va una Expropiación donde Mariano y, además de quitarle el mechero, le enreda el discurso, si es que tiene alguno. Va otra Expropiación y se queda con la foto de un paquidermo reventado a tiros.
Un común entre las Expropiaciones es la querencia por las Rentabilidades (merecen un capítulo aparte). En Euskadi hubo una Expropiación que no lo tuvo nada fácil. Caminaba esta de la mano de un dictador y una empresa eléctrica y quiso construir una central nuclear en la cala de Basordas. La historia de esta Expropiación es conocida, es vieja, es lamentable en muchos sentidos.
Entre la playa de Bakio y el puerto de Armintza la línea de costa marca tres puntas: Andatza, Portume y Urbieta. Esta última presidía la cala de Basordas, una brecha rocosa donde desembocaban un arroyo y su pequeño valle. Era un tramo de costa excelentemente conservado y alejado de los grandes centros industriales. Un tesoro natural del que hoy sólo quedan viejas imágenes. En 1972 comenzaron a verterse sobre ella 200.000 m3 de hormigón. Estas fotografías que adjunto están tomadas en 1927.
La central nuclear de Lemoiz, fue construida sobre la cala de Basordas, que fue cerrada y drenada mediante un dique. Está situada a 30 kilómetros por carretera de Bilbao y 15 en línea recta. Comenzó a construirse en 1972 como parte de un proyecto eléctrico nacional llevado a cabo por la dictadura de Franco, que incluía otras centrales en Deba e Ispaster (sobre las olas de Ogeia).
Cuando las obras finalizaron y se disponía a su puesta en funcionamiento, tan sólo faltaba la introducción del combustible nuclear, fue paralizada y posteriormente desmantelada. La central nuclear fue construida por la empresa eléctrica Iberduero, actualmente llamada Iberdrola.
Tengo sitio libre 
Decía Don Quijote que era importante conocer la historia para no repetirla. Gracias willy, por mantener viva ésta.
«Renunciar a olvidar, renunciar a la venganza»… pero visto semejante acto resulta dificil no vengarse. Será que la naturaleza ya viene haciéndolo de un tiempo a esta parte? No nos merecemos menos… No entiendo nada…
Un abrazo Willy.
No sé si menos, pero sí merecemos algo mejor.
Abrazo de vuelta, Silvia… ¿en Gernika?
Thanks for letting me camp out in your blog this morning. I enjoyed reading and tried to leave my campsite as clean as when I arrived.
En los años 1957 hasta los sesenta, mi familia junto con otra muy amiga, hacíamos camping en Basorda. Pasábamos los tres meses del verano acampados ahí. Las mujeres y los niños estábamos todo el verano, los hombres se quedaban lo que les permitía el tiempo de vacaciones. En aquella época era difícil encontrar tiendas de campaña para comprar. Había que encargarlas a los que viajaban a Francia. Mi abuela llegó hacer una cosiendo la tela en su maquina de coser. Esa tienda parecía la carpa de un circo!! Ahí dormíamos toda la muchachada. Me encantaría encontrar a alguien que hubiera compartido ese espacio y especialmente en aquella época. Aquello fue una experiencia única e inolvidable. Que hayan destrozado ese sitio, no tiene perdón.